Actualizado 2018-04-02 08:24:58 | Spanish. xinhuanet. com
Por TAO LIN
En 2018 se cumplen 30 años del establecimiento de vínculos diplomáticos entre China y Uruguay. No obstante, los intercambios comerciales entre ambas naciones se iniciaron mucho antes, gracias a la política de reforma y apertura que este año cumple cuatro décadas. La empresa uruguaya Lanas Trinidad llegó al dragón asiático en 1982 respetando su lema de “producción sustentable en armonía con el medio ambiente”. Es la empresa pionera en los vínculos comerciales entre ambas naciones.
“En 1986 abrimos una oficina de representación y vimos con agrado el establecimiento de relaciones entre Uruguay y China en 1988”, recordó Pablo Otegui, representante de Lanas Trinidad en Asia, durante una entrevista con Xinhua.
Destacó que desde ese momento ha habido una relación entrañable entre ambos gobiernos que se extendió a los negocios. Esa primera oficina estaba en Hong Kong y posteriormente se movió a Macao hasta hoy día. “La idiosincrasia portuguesa es más similar a la uruguaya, es mi visión personal”.
Nacido en Montevideo, Pablo se graduó como ingeniero textil en Argentina y posee un doctorado en filosofía en España. La empresa familiar se fundó en 1916. Las lanas uruguayas, de excelente calidad, poseen características propias de alto valor para los procesos industriales y los productos que se fabrican con ellas.
“Nuestra empresa ha implementado un programa de trazabilidad de la lana comenzando desde la estancia hasta la entrega del contenedor de lana peinada a nuestros clientes”.
El atractivo régimen de promoción de inversiones que tiene Uruguay le ha garantizado un fuerte flujo de Inversión Extranjera Directa (IED) en la última década. Muchas empresas chinas se han asentado en dicho país, como Chongqing Lifan de fabricación de partes y accesorios para motores de vehículos, el Grupo COSCO agente de transporte marítimo, Huawei, la Corporación Internacional Geely, entre otras. A nivel sectorial, las inversiones chinas se orientaron al sector industrial y de servicios, entre otros.
En ese país sudamericano se producen anualmente 28 millones de kilos de lana, lo que lo convierte en uno de los mayores exportadores a nivel mundial. El último informe de 2017 que aparece en lanastrinidad.com, reconoce que las exportaciones de lana sucia, lavada y peinada durante el periodo enero a noviembre se ubicaron en volumen un 8,7 % por encima del mismo periodo de 2016 y un 3 % por encima si se consideran los datos en valor. El principal producto exportado fue lana peinada, luego lana lavada y lana sucia. China es el principal destino para la lana sucia y lavada mientras que Alemania se consolida como el principal destino de las exportaciones de lana peinada.
Pablo se mudó a China desde que se estableció la oficina de la empresa familiar. “Uruguay es un país democrático y en estos años los tres partidos políticos que han ocupado la presidencia han continuado manifestando como política de Estado la buena relación con China, desde 1988 todos los presidentes uruguayos han visitado China”.
Recordó que inicialmente en los años 80 del siglo pasado, Lanas Trinidad solo negociaba con una empresa china, Chinatex. “China se fue abriendo económicamente y el sector se amplió. Actualmente mantenemos negocios con más de 10 empresas chinas fundamentalmente en Beijing y Shanghai”, afrmó, y agregó que la empresa continúa manteniendo excelentes vínculos con Chinatex. Los principales clientes de Lanas Trinidad son empresas de China, Alemania, Italia, Turquía, Bulgaria, Corea del Sur, Japón, Reino Unido, Colombia, Perú, México y Uruguay, entre otros. “Para nosotros es primordial el continuo relacionamiento con nuestros clientes porque nos permite conocer y satisfacer sus requerimientos”, indicó.
Uruguay y China son países que se complementan. “Al comienzo de las relaciones diplomáticas no producíamos ni exportábamos soja, y el año pasado exportamos más de 3 millones de toneladas de este producto a China. Tampoco exportábamos carne y hoy somos el primer exportador de carne a China. Eso es difícil de entender”, resaltó Otegui. El crecimiento de China ha potenciado el de Uruguay. “En estos años como socios comerciales hemos pasado tiempos muy buenos y otros que hemos sabido sortear gracias a la gran amistad”, manifiestó.
Agregó que Lanas Trinidad lleva 36 años en China, por lo que podemos afirmar que después de la reforma y apertura fue la primera empresa de América Latina que comenzó a hacer negocios con el país asiático. “La familia Otegui comparte las alegrías de China, un país que crece, que mejora las condiciones de vida de la gente y en el que el progreso es una constante”. Actualmente en varias tiendas en línea de taobao.com, uno de los gigantes de las ventas por internet en China se vende lana uruguaya.
Pablo rememoró la pobreza en los años 80 del siglo pasado que era notable. “Por ejemplo en la vestimenta, el transporte y la construcción de infraestructura de la ciudad”. Pero las cosas han cambiado mucho en China. “Es un motivo de satisfacción cada vez que vengo me encuentro una mejora en todos estos aspectos y muchos otros nuevos”, agregó. Continuó diciendo que de la sociedad china valora positivamente la permanencia de valores como la celebración familiar de la Fiesta de Primavera. “Han cambiado muchas cosas pero el sentimiento de los chinos, sus valores familiares se mantienen, y son fuertes. Las principales ciudades se quedan casi vacías en esos días porque la gente va a visitar a sus familiares”
Otegui afirmó que durante todos estos años su crecimiento profesional ha estado vinculado a China. Recientemente volvió de sus vacaciones en Uruguay. Llegar a China le provoca una sensación especial. “A medida que van apareciendo más chinos en mi camino siento la sensación de regresar a casa”, agregó.